Los labios del japonés se rodearon completamente la lengua del coreano quién miraba desde arriba las acciones del ajeno antes de marcharse, sus manos olvidaron rápidamente que sostenían el micrófono para dejarlo caer al suelo, ambas palmas se aferraron contra la cabeza húmeda por tanto movimiento mientras los ojos de Mookyul se cerraban fuertemente moviendo su boca al ritmo de la ajena, en ese instante la multitud extasiada comenzó a dar gritos eufóricos por lo que sus ojos veían, ciertamente una escena que no se volverá a repetir (por lo menos en público), una que otra mujer cayó llorando arrodillada por lo que su adicción demencial producía en sus cuerpos al igual que en su entrepierna húmeda por tanta excitación, los paparazis fotografiaron el momento, las mujeres sacaron de sus bolsillos torpemente los celulares con cámara para inmortalizar el momento en una simple imagen que recorrería celular por celular, mas a pesar del alboroto ocasionado Mookyul aprovechó el beso otorgando importándole poco si era un beso para demostrar quién de los dos era el ganador.
-Será idiota…- suspiró el mánager quién movía la mano para dejar entrar al resto del grupo al escenario mientras arriba el beso entre ambos vocalista continuaba impactando.
-Mookyul, es hora de que te detengas- Ordenó el coordinador por el intercomunicador diminuto que yacía en su oreja, mas a pesar de que Mookyul sabía que debía hacer caso no se detuvo, su cabeza se movió hacia un lado mostrando abiertamente su lengua sobrepasar el portal que daba hacia la garganta, sus dedos se entrelazaban desesperadamente en las puntas de los cabellos que hace un año y algo tocaba con facilidad y entre abrió sus ojos para mirar la expresión de Ryuichi que yacía frente a él, mas el contrario se alejo dejando un vacio en su parte delante, estiró su brazo mientras a su lado una chica le entregaba el micrófono para que este siguiera cantando y con la respiración agitada susurró –Saranghae…- el susurro placentero y grave obligó a las mujeres a callarse por un momento mientras estiraban las manos hacia Sakuma como entregando sus sentimientos a la distancia y Mookyul nuevamente susurró con la respiración agitada _-Hey…saranghae-
Las mujeres continuaron en llanto mientras una música melancólica comenzaba a sonar por los parlantes al momento de generar su declaración furtiva, la mano del mafioso se apretó lentamente mientras su vista se clavaba en la espalda de Ryuichi que comenzaba a desaparecer y al verse desesperado desvió su mano empuñada hacia un lado como si la estuviera azotando contra la nada, las mujeres se quedaron en silencio escuchando solo la respiración del coreano quién desviaba la mirada hacia las fans derrotadas por su amor demente y bajó la vista dañado para comenzar a interpretar el papel de vocalista como el peliverde le había enseñado.
-Bad…woman- El sonido del teclado comenzó mientras la mano de Mookyul recorría su vientre subiéndola hacia su pecho, por la acción su dermis quedó levemente descubierta mostrando la formada estructura del coreano quién cerraba los ojos desviando el rostro mientras los demás integrantes del grupo salían de la misma forma que él.
http://www.youtube.com/watch?v=yaH50uOFaFk
Comenzó a cantar estirando el brazo como si cortara el aire con sus manos mientras su mente luchaba por no destrozarse sobre el escenario, aquel beso y aquel hombre habían producido un desconcierto más allá de lo normal por lo que tuvo que morderse fuertemente el labio inferior para no salir arrancando raptándose al cantante japonés que al parece ya había abandonado el recinto.
El coro de la canción se hiso intenso al momento de caer arrodillado el vocalista al suelo, colocó una de sus manos contra el piso flotante de color negro mientras continuaba cantando el coro como si se tratara de un ruego, los integrantes del banda se miraron consternados mas no dijeron, continuaron tocando dejando al Show men hacer lo que deseara, al fin y al cabo aquel hombre era la principal atracción de corea.
Mookyul se levantó después de verse derrotado agarrando uno de los parlantes para destrozarlos mientras continuaba cantando prácticamente desesperado, las mujeres gritaron al hombre que continuaba haciendo destrozos mas continuaba con el show y al momento de ejecutar la frase final de la melodía se tapó el rostro para dejar salir un leve lamento, en su mente lo único que podía ver era el recuerdo y la sensación de aquel que había desaparecido nuevamente.
-¡¡NO LLORES MOOKYUUL!!-
-¡YO TE AMO, CUIDARÉ DE TI!!-
-¡¡POR FAVOR NO LLORES MAS!!- Las mujeres eufóricas por lo que sus ojos veían comenzaron a llorar al momento de ver el estado débil del cantante quien continuaba con el rostro tapado, mas después de un momento la mano comenzó a caer y la sonrisa maldita y fría del cantante se dejó ver en la pantalla, las mujeres se callaron secando sus lágrimas mientras el coreano estiraba sus dedos en V para comenzar a lamerlos, el aro que antiguamente el conejo colocó en su boca ahora se dejaba mostrar con total claridad.
-Nee~~ Mooky.pooh –El japonés entrelazó sus manos en el negro cabello del coreano quién sujetaba una de las piernas del ajeno a nivel del muslo para poder ver claramente su erección, la boca del pelinegro succionó el miembro que temblaba una que otra vez apretando el cuerpo esponjoso con sus dedos húmedos por el semen del japonés, su lengua recorrió el glande mientras tapaba con su dedo la punta de la uretra moviendo la cabeza del miembro de un lado hacia a otro.
-Uhm? – Respondió indiferente mientras alejaba su rostro quitando el semen de sus labios con sus nudillos, Ryuichi sonrojado por la excitación le apretó los cabellos al coreano mientras dejaba caer su pantorrilla sobre el hombro de éste sonriendo al momento de lamer el semen que quedó en la mejilla clara.
-Y yo quiero un unicornio pero no puedo tenerlo todo en esta vida- Ryuichi rió por la forma en que contestó el joven quién deslizaba su lengua por el muslo húmedo hasta llegar al costado del pubis el cual mordió afanadamente, mas detuvo el avance del hombre para levantarse del sillón deslizando por sus hombros la camisa blanca del coreano que había puesto sobre el después de una exquisita ducha. Se detuvo frente a la puerta de la habitación mientras levantaba la terminación de la camisa para dejar sus firmes nalgas al descubierto moviéndolas de un lado hacia otro como haciendo una invitación.
-Pues entonces no podrás tocarme hasta sedas a mi exigencia –Se dio la vuelta sonriendo altivo mientras Mookyul cabreado por la forma en que el contrario pisaba su orgullo cruzaba sus piernas sonriendo con una notoria vena en la frente.
-No es como si estuviese pensando todo el día en follarte –Respondió seguro de sí mientras retiraba un cigarrillo del bolsillo de su camisa.
-Pues qué lástima…- El peliverde Recorrió su vientre desnudo con sus manos para dejarlas caer sobre su miembro duro al cual comenzó a masturbar suavemente.
-Nunca me pondré el puto aro-
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Mookyul agitó su lengua para hacer la insinuación de que deseaba lamer la entrepierna de alguna afortunada presente mientras el aro plateado brillaba con intensidad y así el show continuó.
-¿Qué?, ¿sakuma-san no cantará?- El manager miró algo desconcertado a Seguchi quién enfadado por la falta de compromiso del japonés hacia una reverencia para disculpar el error, Kai, el manager suspiró escuchando que los chicos bajarían del escenario después de cantar aquella canción, los fans ya no les importaba que el vocalista de Lust y de NG ya que habían recibido un fans service completamente satisfactorio, fue así como el concierto de ambos “magnates” se dio por acabado.
Mookyul se bajó del escenario recibiendo las flores que el equipo daba cada vez que terminaba un concierto, mas ya no estaba preocupado por ello, por lo que le entregó las flores a Jun y avanzó entre los periodistas y los integrantes llegando hacia donde estaba Seguchi.
-Dime donde está Ryuichi- El rubio ladeó el rostro señalando la puerta como indicación de que ya se había marchado a su lugar de descanso, Mookyul desvió el rostro deslizando sus dedos por su cabellera mientras chasqueaba la lengua algo cabreado por la manera que tenía el ajeno de arrancar de él.
-Te daré la dirección si prometes dar una buena entrevista en nombre de ambos grupos, obviamente sin recibir paga alguna- Seguchi sonrió como un zorro mientras dejaba caer su cabeza hacia un lado a la espera de la respuesta que llegó después de una expresión asesina, fue así como ambos se dirigieron hacia la parte posterior del lugar para dar una apropiada conferencia.
Se sentó en la silla preparada mientras limpiaba el sudor que quedó después del concierto en su frente, los demás integrantes de ambas bandas se sentaron a los costados creando una fila larga de gente talentosa, y fue así como las preguntas comenzaron.
-¿Es cierto que Sakuma-san fue un conocido del señor Mookyul?- Un hombre gordo de mediana edad lanzó la primera pregunta ante la polémica causada por los vocalistas en el escenario.
-Conocer a artistas extranjeros es parte de éste trabajo- Respondió indiferente mientras movía los pies por el nerviosismo de su cuerpo.
-¿Era parte del espectáculo que ambos se besaran?- Ahora una mujer emocionada preguntaba a la espera de la segunda respuesta.
-...¿Acaso no le gustó?- Respondió Mookyul mientras echaba hacia adelante su cuerpo apoyando una de sus mejillas en su mano empuñada, la mujer al escuchar la respuesta bajó el rostro sonrojada para volver a sentarse a la espera de poder sacar alguna información en concreto.
-¿Usted es homosexual?- Un joven novato se aventuró a preguntar después de levantar la mano, los presentes lo quedaron mirando por su falta de sensatez mientras los artistas reían por la pregunta. Mookyul se levantó mirando la hora en su reloj, ya pasaban las 0 horas y el deseo desenfrenado de aclarar las cosas con el peliverde comenzaba a colmarle la paciencia.
-Fue un show grato, espero poder compartir el escenario con Sakuma-san nuevamente, quizás haya algo más que besos- El sonido de las cámaras al igual que las luces comenzaron a inundar la habitación que era abandonada por mookyul después de responder a lo debido, Seguchi le entregó un papel con la dirección y se dirigió hacia allá sin mucha vacilación.
Se subió rápidamente al auto para que las mujeres amontonadas no se abalanzaran sobre él, vio la dirección y apresuradamente partió hacia el elegante edificio ubicado en el centro de Seul, allí las mujeres desviaron su mirada hacia el hombre que caminaba con paso apurado por el Hall del hotel.
El ascensor demoró lo suficiente como para hacerlo perder los estribos golpeando la puerta gruesa de metal, puto edificio tenía unos 20 pisos aproximadamente y al conejo bastardo se le ocurrió la genial idea de ir a esconderse en el último piso de éste, las puertas del ascensor se abrieron y caminó hacia la puerta del lugar observando que en ésta un dormido K yacía abrazado a su pistola, por alguna maldita razón aquel rubio colocó el respaldo de la silla contra uno de los marcos de la puerta mientras su pie se afirmaba contra el otro marco acaparando completamente la entrada, si lo despertaba no habría oportunidad alguna de ver a Ryuichi esa noche.
-U hu huu...u hu huu- comenzó a tararear una canción de cuna mientras bajaba la pierna ajena con cuidado para no despertarlo y al dejarlo en el suelo abrió lentamente la puerta escabulléndose como un vil ladronzuelo apoyando la espalda en ésta después de cerrarla, mas los ojos del norteamericano se entre abrieron pensativos dejándolo pasar a pesar de las consecuencias.
Se paró al lado de la cama observandola un profundamente dormido Ryuichi quién lloraba en sueños quizás por qué razón, desvió la mirada buscando al conejo por algún lugar, mas no lo encontró, por lo que dedujo que esa era la razón del llanto. Sus manos se apoyaron en la cama para bajar el rostro besandole los ojos a la "bella durmiente", su lengua lamió las saladas lágrimas que desaparecieron lentamente dejando sólo un rastro brilloso.
-Ryui...- Susurró el coreano quién se tiraba lentamente al lado del japones para no despertarlo.
-Mookyul Eun, si escucho un grito me adentraré para dispararle hasta el cansancio...- Pensó K mientras abrazaba su cuerpo por el frío de la entrada. -Debería haber sacado una manta...-
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